Se volvió de nuevo, levantó la mirada y fijó sus ojos lagrimosos en mí por última vez. Sujetó la maleta con torpeza, y avanzó por el gangway hasta dejarse caer en los bancos del tender. Y así, sin más, todo terminó. De repente, lo que iba a ser una gran aventura, acabó siendo un duelo devastador. Después de años luchando sin descanso, todo se desvaneció. Así, sin más, sin una explicación. Qué irónica es la vida. Han ocurrido muchas cosas surrealistas a mi alrededor pero… ¿Ahora esto? ¿De verdad está pasando? No puedo creer que esto sea real…
Ese sentimiento de impotencia, rabia, desilusión y dolor fue el más profundo que he experimentado en mi vida.
Cuando acecha la tormenta…
Estamos viviendo un momento de gran estrés e intensidad a nivel mundial. La situación que se está produciendo a causa del coronavirus nos ha forzado a todos a poner el freno. Es un momento de pánico y confusión, de incertidumbre y preocupación. No obstante, esta crisis existencial anima a la reflexión, a tomar aire y respirar, y a cuestionarnos sobre el porqué de lo que nos ocurre.
Estoy segura de que habrás tenido momentos de pánico a lo largo de tu vida; de rabia y desesperación; de sentir que no puedes más y querer desprenderte de todo. Sin embargo, con tiempo y, tal vez, un poco de ayuda externa, habrás terminado superando esa crisis de una manera u otra.
…Es necesario resguardarse
El párrafo que da comienzo a este artículo representa mi estado de depresión hace unos meses. En ese momento, me sentí devastada. Sentía que la vida se me iba, que ya nada tenía sentido. Todos mis esfuerzos y mis ganas de luchar se habían desvanecido. Además, ¿sabes eso que dicen de que las desgracias no vienen solas? Pues lo cierto es que no dejaron de producirse situaciones que iban agravando poco a poco mi estado de desesperación.
Por suerte, la vida quiso que no estuviera sola. Tuve gente en mi entorno que me ayudó infinitamente a recuperarme y no dejar que me hundiera demasiado. Alejada de mi hogar, de mi familia, de la persona que más quería, de mi perra y de todo lo que me hacía feliz, ya sólo me quedaba confiar en aquellos que decidieron ofrecerme su mano y no soltarme.
Al fin y al cabo, la única opción es seguir adelante
Seguramente lo habrás oído en alguna ocasión. Ya que hablamos de culturas, conviene hacer mención al alfabeto chino. Y es que en chino, la palabra crisis se compone de dos caracteres, como se observa en la imagen: Wei, que significa peligro; y Ji, que significa oportunidad.
No me malinterpretes. No, no pienso que las crisis conlleven de forma inherente una oportunidad. Lo que quiero decir es que, en momentos de desesperación, rabia, frustración e insostenibilidad, si se desea seguir adelante la única opción es precisamente esa, CONTINUAR. Pero, inevitablemente, ante este punto de inflexión, deberemos adoptar una manera diferente de avanzar en el camino pues, de no hacerlo, correremos el riesgo de terminar de la misma forma. Es por ello que, ante esta situación, es necesario abrazar la idea de OPORTUNIDAD, para encontrar otro camino que nos lleve a un lugar mejor.
Y la ayuda externa, ayuda…
Después de mi fatal encuentro con el destino, fue difícil continuar. La vida en el barco es muy intensa, la gente convive día y noche con los mismos compañeros. Nos vemos en el desayuno, en el trabajo, en los pasillos, en el almuerzo, en los descansos, en la lavandería, en el gimnasio y en el bar. Todos saben sobre la vida de todos. Por tanto, no era de extrañar que comenzasen a hacerme preguntas.
Como decía, el tiempo y la ayuda externa son cruciales a la hora de superar ciertos duelos. Y para mí lo fue. Por suerte, como he mencionado, pude contar con gente buena a mí alrededor, que me ayudó a seguir adelante y a enfrentarme a mi propia lucha.
Por si te sirve de ayuda, más allá de los abrazos, las palabras de consuelo y los momentos compartidos, un buen amigo me recomendó un libro realmente útil:
Si te interesa conocer más libros al respecto, puedes echar un vistazo a mi artículo “10 libros que cambiarán tu forma de ver el mundo”.
Reflexión final: Tu vida depende de tí
La vida es impredecible. Podemos pasar horas, días, meses o incluso años planificando y, en cualquier momento, surgen imprevistos que hacen que todo se derrumbe. ¿Y qué vas a hacer? ¿Quedarte quieto en una esquina esperando a que la vida te pase desapercibida?
Vivir puede doler. Pero es ese dolor el que nos avisa de que estamos vivos. Puede sonar a tópico de libro de autoayuda pero, no merece la pena arrepentirse de lo vivido. Si lo hiciste es porque lo sentías, y el camino que elegiste te llevó hasta lo que eres ahora. Perdona a tu yo del pasado pues, gracias a sus heridas, hoy caminas más fuerte. No siempre será fácil pero, si lo permites, contarás con las personas y los recursos adecuados para hacer que el dolor merezca la pena. Lo más difícil será, sin duda alguna, dejar atrás el pasado, después de agradecer todo lo que éste te enseñó.
En este momento, a consecuencia del Estado de Alarma, se están produciendo multitud de iniciativas vecinales y proyectos de cohesión social en España, movidos por la solidaridad y el deseo de colaborar con los que más lo necesitan. Esperemos que, entre todos, sepamos aprender de nuestro pasado, y aprovechemos el momento para comenzar a caminar hacia un futuro mejor.
Si lo deseas, puedes echar un vistazo a mi artículo anterior, “Coronavirus: Moraleja de esta crisis humanitaria en los países desarrollados”.
Y recuerda…
When you’re down down down… GET UP AND GET OVER IT! 🙂
https://www.youtube.com/watch?v=YaI_5J4-qlU
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WHEN YOUR WHOLE WORLD FALLS DOWN, THE ONLY OPTION IS TO KEEP GOING
He turned around again, raised his head and kept his tearful eyes on me for the last time. He took his suitcase awkwardly and walked towards the gangway until he let himself fall into the tender. And then, everything ended. Suddenly, the grand adventure ended up being a devastating duel. After all those years fighting ceaselessly, everything vanished. Just like that, without any explanation. How ironic life is. Many unreallistic situations have happened around me but… Now this? Is this really happening? I can’t believe this is for real…
That feeling of impotence, anger, pain, disappoointment and heartbreak was the deepest that I’ve ever experienced.
When the storm is coming…
We are experiencing a moment of real stress and intensity in the whole world. The situation that is happening due to the Coronavirus has forced us to slowdown. It is a moment of panic and confusion, uncertainty and concern. However, this crisis encourages us to take a breath and reflect on what is happening to us, and why.
I am sure you might have had some moments of panic during your whole life; a moment of anger and dessesperation; a feeling of not being able to go on, wishing to come off everything. But, with some time and, maybe, some help, you ended up getting over that crisis somehow.
…We need to shelter ourselves
The first lines of this article express my feelings a few months ago. At that moment, I was devastated. I felt that my life was going away from me, that nothing made sense anymore. All my efforts and motivation to fight had vanished. Besides, Do you know that thing about misfortune doesn’t come alone? Well, a wave of unstoppable and unexpected events also happened during the following months, which made my dessesperation increase considerably.
Fortunately, Life wanted me not to be alone. I was around good people, who helped me to get over it. Away from my family, the person that I loved the most, my dog and everything that made me happy, I could just trust the people who were holding my hands.
In the end, the only option is to keep going
Maybe you have already heard about this. Here we are talking about cultures, so it is convenient to mention the chinese alphabet: the world crisis, in the chinese alphabet, is made up of two characters, as you can see in the picture above: Wei, which means danger; and Ji, which means opportunity.
Please, don’t misunderstand me. No, I don’t think that crisis imply an inherent opportunity. What I mean is, in moments of dessesperation, anger, frustation and insostenibility, if we really want to go on, the only option is just that one, GO ON. Keep moving. But, by that point, we should adopt a different way to keep walking our path, unless we want to end up in the same way as before. Therefore, we need to embrace the idea of OPPORTUNITY, to find another way that leads us to a better place.
And some help, may really help…
After my brutal encounter with the destiny, It was hard to continue. Life in a ship is very intense, people live together day and night. We see each other at breakfast, at work, in the hallways, at lunch, during the short breaks, making the laundry, at the gym or at the bar. And everybody knows everything about people’s lives.
As I said before, time and help are crucial to get over some duels. And they were for me. I was lucky enough to have good people around me, who helped me to face my own fight.
In case that you could use some help, beyond the hugs, the comforting words and the shared moments, a really good friend recommended me this book:
If you want to know more about some similar books, you can take a look at my post “10 libros que cambiarán tu forma de ver el mundo”. I promise I will translate it as soon as posible!
Final thoughts: your life depends on you
Life is unpredictable. We can spend hours, days, months or even years planning and, at any moment, unpredicted events happen and make everything fall down. So what are you going to do? Stay still in a corner, waiting for life to pass by?
Life can hurt sometimes. But that pain makes us be aware of the fact that we are alive. This can sounds cheesy or typical of a self-help book, but it is not worth to regret about your past. If you did it, it’s because you meant it. And the way you chose guided you to the person that you are now. Thanks to the wounds of your past, you walk stronger today. And no, It won’t always be easy. But, if you allow it, you will count on the appropriate people and resources to make the pain worth it. The most difficult thing will be let things that you still love go away, after giving thanks for what they taught you.
At the moment, due to the State of Alarm, we are having a lot of neighboring initiatives and social projects in Spain, promoted by a desire to cooperate with needy people. We wish that, all together, we will be able to learn from our past, and we will make the most of this moment to start working for a better future.
If you wish, you can take a look at my previous post “Coronavirus: Moraleja de esta crisis humanitaria en los países desarrollados”. I’ll translate as soon as I can!
And remember…
When you’re down down down…. GET UP AND GET OVER IT!!
