BLUE ZONES: CÓMO VIVEN LAS PERSONAS MÁS LONGEVAS DEL MUNDO

Anteriormente, he publicado artículos relacionados con la alimentación en el mundo, la manera de percibir el tiempo y de relacionarnos con los demás en las distintas sociedades y culturas, que tienen que ver con el tema que tratamos en esta ocasión.

Yo también he sucumbido a ese gran pensamiento generalizado entre las sociedades que perciben el tiempo como algo fugaz, pasajero y limitado: el tiempo es oro, y hay que aprovecharlo.

De un modo u otro, todos le damos cierta utilidad al tiempo y al uso que hacemos de él: ya sea para trabajar, hacer deporte, dormir, cotillear Facebook o ponernos al día tomando algo con amigos, todos le damos un uso a nuestro tiempo y generamos una idea alrededor de ese uso en base a unos valores.

Hace poco, en mi intento por unir productividad con relajación, empecé a “autoobligarme” a ver algún episodio corto de algo en inglés a diario. Y, de esta forma, di con uno de mis últimos descubrimientos en Netflix: “Con los pies en la tierra”.

ZONAS AZULES: LAS POBLACIONES MÁS LONGEVAS DEL PLANETA  

A lo largo de los diferentes capítulos, tratan cuestiones de gran importancia para las sociedades actuales y futuras. Conecta las necesidades más urgentes con diferentes aspectos de nuestra cultura, y la necesidad de hacer un cambio si queremos contribuir a la conservación y mejora del planeta y de los recursos biológicos y culturales.

Y, entre reflexiones sobre la comida, la energía, el agua y el cambio climático, llegamos a la cuestión que hoy nos concierne: las zonas azules.

Las blue zones o zonas azules son lugares del mundo donde la población tiene una esperanza de vida muy alta, superando los 100 años, y en unas condiciones físicas y neurológicas envidiables.  Estas zonas fueron descubiertas y estudiadas profundamente por Dan Buettner y su equipo de científicos, para tratar de descubrir los puntos en común que hacían que la vida de estas personas fuera tan longeva.

Si te estás preguntando cuáles son esas regiones, aquí tienes la respuesta. Se trata de cinco zonas conocidas hasta ahora, que se encuentran en:

• Cerdeña (Sardinia), Italia. En este lugar es donde se desarrolla el documental. ¡No te lo pierdas!
• Nicoya, Costa Rica.
• Icaria, Grecia.
• Okinawa, Japón.
• Loma Linda, California.

Como ves, se trata de lugares repartidos por distintos puntos del planeta, aparentemente sin ningún tipo de conexión entre ellos. Entonces, ¿Qué tienen de especial estas poblaciones? ¿Qué características comparten, que les permiten desarrollar una vida plena y saludable por un período de tiempo prolongado?. Entremos más en detalle.

ASPECTOS QUE CARACTERIZAN A LAS ZONAS AZULES

En el documental, se abordan varios aspectos importantes de forma amable, responsable y emotiva. A continuación, comparto contigo un análisis de la reflexión personal que extraje tras ver el documental y seguir investigando por mi cuenta.

Al hacer frente a una cuestión tan delicada, no nos limitamos al concepto de la edad cronológica, sino que observamos también la edad biológica, y en está influyen aspectos como la salud, la actividad física, la alimentación, pero también otros más profundos como los sentimientos y pensamientos. Por tanto, veamos los hábitos más característicos de las zonas azules.

– ALIMENTACIÓN

Llevan una alimentación basada en productos naturales y elaboraciones caseras, donde se priorizan las verduras y los alimentos de temporada, alta en carbohidratos de calidad y moderada en proteínas. Se consumen grasas saludables (como el aceite de oliva), frutas, legumbres y productos de la tierra, y se limitan los dulces, el alcohol y las proteínas animales.

– ACTIVIDAD FÍSICA 

Se mueven a diario. Y no hablamos de ir al gimnasio o de salir a correr con toda la equipación del Decathlon. Se trata de moverse continuamente para realizar sus tareas cotidianas: cuidar del jardín y de los niños, limpiar la casa, visitar al vecino, salir a tomar una infusión, ir a comprar, etc.

En la mayoría de las sociedades occidentales, gran parte de la población desempeña largas jornadas laborales frente al ordenador. Además, nuestro entretenimiento suele requerir poca actividad física, y los avances tecnológicos han hecho que, cada vez, tengamos que esforzarnos menos y que estemos más enganchados a los dispositivos digitales. En las zonas azules, las personas suelen cultivar, caminar y pasar tiempo con la familia y amigos.

– ALTOS NIVELES DE SOCIALIZACIÓN

Como decíamos, en estos lugares se mantienen vínculos sociales muy fuertes con los familiares y amigos. Y el contacto no es a través de una pantalla, sino que se desplazan, se ven en persona, y pasan tiempo conversando y compartiendo momentos de calidad. Dan gran importancia y valor a su pertenencia en determinados círculos sociales, lo que les ayuda a reducir los niveles de estrés y ansiedad.

– PROPÓSITO VITAL

 Los habitantes de las zonas azules crean metas, tienen ambiciones, persiguen un propósito de vida claramente definido, lo que les da fuerzas para levantarse por las mañanas. Y éste no tiene por qué ser algo tangible, material. El simple hecho de pasar tiempo con las personas que aman y ser felices, puede ser motivo suficiente para sentirse satisfechos por vivir un día más.

En Okinawa, a esa “razón de ser” la llaman “Ikigai”. En ocasiones, también se relaciona con un sentimiento de espiritualidad, unido a la religión (como el budismo) y a la meditación, ya que alimenta el alma de las personas que se sienten plenamente atraídas y fieles a sus creencias.

LA VIDA DESDE UNA PERSPECTIVA DIFERENTE

En definitiva, las zonas azules recogen los aspectos más importantes de la vida humana, que se simplifican en aspectos nutricionales, espirituales y sociales. Estos estudios nos ofrecen una gran lección de vida: nos hacen tomar conciencia sobre aspectos tan importante para la vida en la tierra: cuidar nuestra relación con el medioambiente y agradecer por los productos de la tierra, disfrutar de nuestros amigos y familiares, saborear los momentos más dulces de la vida, caminar con paso firme hacia nuestros sueños, y celebrar que la vida nos regala un día más.

Y tú, ¿qué piensas de las blue zones? ¿En qué crees que se diferencian de tu entorno y forma de vida? ¡Comparte tu opinión! 🙂

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