Ya hemos hablado anteriormente de la agricultura ecológica. Se trata de un sistema de producción agrícola que pretende ser responsable y respetuoso con el medioambiente. Para ello, se recurre a técnicas amables que no utilizan productos químicos y que aprovechan todos los recursos naturales de manera no invasiva.
Por tanto, la agricultura ecológica prohíbe el uso de Organismos Modificados Genéticamente (OMG), y recurre a un sistema de rotación de cultivos para mejorar la fertilidad de los suelos y permitir continuar con nuevas cosechas sanas.
Las semillas, la base de la agricultura ecológica
Para que la agricultura ecológica cumpla con estos objetivos, no sirve cualquier semilla. Será necesario utilizar semillas que provengan de una producción ecológica, y tener en cuenta aspectos como el clima, el lugar y el terreno en el que se hará la siembra de las mismas.
Es objetivo último de este tipo de agricultura es preservar la biodiversidad del planeta. Es decir, se trata de conservar las semillas tradicionales de cada zona terrestre, que contienen las propiedades adecuadas para brotar en un lugar y clima concreto.
El peligro de la biopiratería para la diversidad biológica y cultural
A pesar de todo lo anterior, uno de los innumerables efectos de la globalización ha sido la posibilidad de transportar estas semillas de una a otra parte del mundo en cantidades industriales.
Sin embargo, no se han tenido en cuenta las consecuencias reales de estas acciones. Y uno de los efectos más peligrosos es, sin duda, el surgimiento de la biopiratería.
La biopiratería hace referencia al acceso y uso irregular de los recursos biológicos, así como los conocimientos tradicionales de comunidades y pueblos indígenas relacionados con ellos.
Por tanto, se trata de la sustracción, explotación, manipulación y comercialización de los recursos propios de la flora y fauna de un territorio, lo cual perjudica gravemente la biodiversidad del planeta.
A pesar de la gravedad del asunto, aunque existe una gran falta de información en la sociedad global. Es un problema que, aunque pueda parecer lejano, nos afecta a todos de forma indiscriminada.
No podemos continuar ignorándolo, es una tarea que nos concierne a todos. Necesitamos promover el conocimiento sobre la necesidad de conservar y proteger nuestra biodiversidad para evitar la extinción de estos recursos naturales tan valiosos.
El papel de los pueblos indígenas
Los pueblos indígenas están tratando de conseguir el reconocimiento de la propiedad intelectual sobre sus recursos y el uso que hacen de los mismos. Sin embargo, se está produciendo el efecto contrario.
La biopiratería provoca que empresas extranjeras se adueñen de los recursos naturales y los patenten, privando a estas comunidades del derecho a mantener su propiedad intelectual e identidad cultural.
Además, muchas de las semillas tradicionales se han visto “contaminadas” con organismos transgénicos para la producción masiva e industrializada de las mismas. En este sentido, se transgrede el valor real de la biodiversidad de los territorios, a cambio de expandir las semillas y modificarlas con el uso de agroquímicos.
Por tanto, esta cuestión va mucho más allá de la mera biopiratería y el uso de los recursos como tal. Se trata de un ataque directo a la cultura e identidad de los pueblos indígenas, sus saberes tradicionales, sus modos de vida y, en última instancia, la biodiversidad del planeta.
Biopiratería en profundidad
A pesar de tratarse aún de una cuestión silenciosa y poco difundida entre la sociedad, cada vez más empresas, organizaciones y movimientos colectivos están tratando de visibilizar el problema real que supone a nivel global.
De esta forma, podemos encontrar recursos que nos permiten profundizar y adquirir conocimientos sobre la situación de la biopiratería y sus consecuencias reales. A continuación, comparto algunos de ellos esperando que te resulten útiles.
– Libro “Oro verde. La naturaleza saqueada. Patentes y biopiratería”
Esta obra aborda la cuestión de la biopiratería en todas sus formas, desde la extracción de plantas y animales de su territorio hasta la apropiación de saberes tradiciones de la población local.
Las empresas transforman nuestros recursos biológicos y culturales en meras materias comerciales a nuestra disposición, ese “oro verde” de los genes de la naturaleza.
– Documental Biopiratería
En un artículo anterior, ya hice referencia al documental “Down to the Earth”, de Zac Efron y Darin Orien. En esta ocasión, te comparto la referencia a un nuevo documental sobre la biopiteratería, con especial mención a las tribus indígenas del Amazonas.
– Libro “La Deuda Ecológica y el Desarrollo sostenible”
El concepto de Deuda Ecológica nace en Latinoamérica a raíz del Convenio sobre el Cambio Climático y el Convenio sobre Biodiversidad. Desde esta perspectiva, se defiende que los países del norte deberían tomar medidas para compensar los daños causados por el Cambio Climático.
En concreto, deberían reducir un 50 o 60% sus emisiones de gases de efecto invernadero. Al no llevar a cabo esta reducción, aumenta su Deuda Ecológica. Sin embargo, muchos de los daños provocados, como la pérdida de culturas y biodiversidad, no pueden compensarse económicamente.
En este libro se abordan aspectos como la globalización sostenible y el cálculo de la huella ecológica, la responsabilidad social, las claves para caminar hacia un sistema ecoeficiente, el desarrollo social y la huella cultural.
El concepto de Deuda Ecológica es un claro reflejo de las injusticias en cuanto al acceso a recursos naturales.
Espero que esta información te haya resultado útil e interesante. No dudes en compartir tu opinión y percepción, dudas o sugerencias. Me encantará saber qué piensas.
Puedes consultar mi artículo publicado en el Centro Mexicano de Relaciones Internacionales: «La biodiversidad de los territorios: nuestra mejor protección frente al coronavirus».
La biopiratería amenaza los hábitos de alimentación tradicionales de distintos grupos sociales en el mundo.
Esta situación es comprobable en América del Sur.Los grupos indígenas han sido desplazados de sus hábitats por intereses económicos,la Amazonia es un ejemplo de la explotación de los recursos por intereses económicos.Los incendios que se produjeron en esta zona son una consecuencia de la alteración de las formas de cultivo practicadas por los nativos.
El cultivo de la soja ha desplazado al de cereales como el trigo y el maíz en algunos países y ha agotado los terrenos.
Es importante hablar de deuda ecológica,pero me pregunto si hay compensación ante los excesos que se han producido.
Raquel,el domingo 31 de enero respondí a tu página del 27 de enero,espero que este comentario te haya llegado.
Gracias por tu comentario Silvia, tienes amplios conocimientos sobre esta realidad tan preocupante y me alegra mucho que lo compartas conmigo. Tienes razón en lo que dices, debemos pensar en soluciones globales ante esta amenaza tan grande que, sin duda, tendrá consecuencias en todos los aspectos de la vida. Gracias por estar ahí! 🙂